Una venía de vuelta de todo, abrasada de fracasos, intentos frustrados por el tiempo. La otra iba al encuentro de un futuro misterioso, de duración incierta. Una ya no esperaba nada de la vida, después de haber vivido los años justos que su rostro reflejaba. La otra nunca se atrevió a esperar nada que la vida no le ofreciera. Los cuerpos mostraban la transparencia de los adentros. Al cruzar, no se miraron. No se habrían reconocido, ni habrían tenido nada que decirse. Siguieron su camino hacia adelante, hacia atrás.
miércoles, 2 de abril de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
AVISO A VISITANTES
Todas las imágenes (salvo excepciones indicadas) y los textos que las acompañan son propiedad del autor de esta bitácora. Su uso está permitido, siempre que se cite la fuente y la finalidad no sea comercial
Si alguien se reconociera en alguna fotografía y no deseara verse en una imagen que puede ver cualquiera, puede contactar conmigo (fredarron@gmail.com), y será retirada sin problema ninguno.
Si alguien se reconociera en alguna fotografía y no deseara verse en una imagen que puede ver cualquiera, puede contactar conmigo (fredarron@gmail.com), y será retirada sin problema ninguno.
7 comentarios:
Me gusta la foto, ese contraste de colores, de claros y oscuros para distinguir dos mundos totalmente diferentes.
Un beso. Gracias, una vez más.
La foto, fantástica.
Lo de la dirección... habría que discutirlo.
Nunca un relato tuyo tuvo un reflejo tan apabullante en una fotografía como este.
El presente y el pasado tan bien conjugados. Me ha RECHIFLADO, la foto por esa diferencia bien marcada entre ambas mujeres, el color para la juventud, el luto riguroso para la anciana, el entorno que detuvo el tiempo, y el relato porque pone palabras a la propia imagen.
Súper bueno, al menos a mí, me ha entusiasmado. Besos
En apariencia una foto(aparte del contraste de color)y una visión normal qué encontramos dia a dia.En cambio, leyendo tu relato
me dá sentimiento se cruzan dos personas qué no se conocen pero si pudieran hablarse y contarse, aunque ya sé qué nadie aprende por cabeza ajena,quizás,esa señora mayor con su sabiduria y experiencia podría decirle a la joven,apura el paso,y vé a ese encuentro no mires atrás y se convierta en un intento frustrado como el mio.O por el contrario:da la vuelta y no pienses en principes azules ni en nada qué se le parezca "tu"eres la princesa de tu cuento. ¡OJO!me ciño a tu relato en realidad igual una va a tomar el café con sus amigas y la otra viene de poner una vela en la iglesia.M.T.
Eduardo, me has recordado la canción de Julio Iglesias:
Unos que vienen y otros que se van,
la vida sigue igual...
La vida es un constante ir y venir...
El otro día, hice una observación parecida, mirando a través de una ventana, abajo ví una niña de seis años montada en su bicicleta, mientras avanzaba, por el mismo camino peatonal se acercaba una anciana con su andador (aparato ortopédico), no pude evitar hacer una reflexión...
Besines
¿A dónde vas para sacar fotos con ambientes como esté? Me refiero a las casas de fondo etc... Me gusta, pero es como de otro siglo. Exceptuando las bolsas del Alimerka.
Excelente la tematica de la imagen!
Muy buen trabajo! Muy buena idea.
Esa imagen dice tantas cosas...
Lastima el auto detras.. Pero eso no arruina para nada la fotografia.
Me encanto!
La verdad, te felicito!
Un Saludo!
Mariano Mendoza.
Fotografo Publicitario
Publicar un comentario