lunes, 1 de marzo de 2010
domingo, 28 de febrero de 2010
MICRORRELATO
DE NUEVO, EL ZORRO
______________________________________
El zorro quiere ser mi amigo, pero yo no le dejo. Me doy dos vueltas seguidas y quedo casi como estaba. Respiro con pesadez; tanto, que me oigo a través de mi cuerpo, como si viviera al otro lado. No le doy razones, ni le explico, pero intuyo que él sabe. Me conoce de otras veces. Yo también a él. Por eso no quiero ser su amigo. En cuanto le diera confianza me pondría ojos tiernos y empezaría a hablarme de mi pelo, del trigo sin cortar y de que lo esencial no se puede ver, sino sentir. Resulta muy pesado. Es un pelmazo, este zorro. Pero tampoco es cosa de humillarlo y degradarlo a ser un personaje de sueño. No lo soportaría si se enterase. Y dejo que me siga mirando, así, a suficiente distancia.
Del libro Micrólogos
sábado, 27 de febrero de 2010
viernes, 26 de febrero de 2010
jueves, 25 de febrero de 2010
miércoles, 24 de febrero de 2010
martes, 23 de febrero de 2010
lunes, 22 de febrero de 2010
sábado, 20 de febrero de 2010
viernes, 19 de febrero de 2010
jueves, 18 de febrero de 2010
miércoles, 17 de febrero de 2010
martes, 16 de febrero de 2010
lunes, 15 de febrero de 2010
domingo, 14 de febrero de 2010
MICRORRELATO
COHERENCIA DEL SOLITARIO
___________________________________
Le fascinaba la soledad. Pero amaba aún más la coherencia. En el desierto, lo alcanzó un beduino que caminaba en su misma dirección. Tuvo que matarlo. Sin poderlo evitar.
Del libro Micrólogos
sábado, 13 de febrero de 2010
viernes, 12 de febrero de 2010
jueves, 11 de febrero de 2010
miércoles, 10 de febrero de 2010
martes, 9 de febrero de 2010
lunes, 8 de febrero de 2010
domingo, 7 de febrero de 2010
MICRORRELATO
ABANDONO
____________________
Cuando amenazaste con que me dejarías, no te creí. Aun así, me dejé inundar por un completo abatimiento. Y acerté. Mi intuición nunca me falla. Porque jamás te fuiste. Maldita.
Del libro Micrólogos
sábado, 6 de febrero de 2010
viernes, 5 de febrero de 2010
jueves, 4 de febrero de 2010
miércoles, 3 de febrero de 2010
martes, 2 de febrero de 2010
lunes, 1 de febrero de 2010
domingo, 31 de enero de 2010
MICRORRELATO
LA CERILLERA Y EL SOLDADITO DE PLOMO
______________________________________________
La cerillera se moría de frío en la noche invernal. No había vendido nada, por lo que estaba de muy mal humor. Un niño, que pasaba con su padre de la mano, le arrojó en la faltriquera un soldadito de plomo viejo con el que iba jugando. Lo miró y lo palpó con los deditos que asomaban por los mitones. Estaba caliente, pero no le confortó lo más mínimo, pues estaba muy enfadada, así que se dedicó a darle repetidos golpes contra el suelo. Como la sonrisa del soldadito siguiera siendo la misma, pese a la deformidad del resto del cuerpo, se propuso castigar tamaña insolencia. Cogió una caja de cerillas, y una a una las fue encendiendo y aplicando a la cara del muñeco. Éste, poco a poco fue desfigurándose y deshaciéndose hasta que múltiples gotas fueron cayendo al suelo. Ella se dedicó a derretirlo por entero, y tanto empeño invirtió, que las gotitas de plomo quedaron esparcidas a su alrededor. Agotada y sin que hubiera cambiado su humor, se recostó sobre el quicio de la puerta donde se encontraba. Sería su última noche. Aterida, moriría cerca del amanecer con un horrible rictus en su cara. Él la había precedido sólo unas horas antes. Su eterna sonrisa planeaba ya sobre ambos.
Del libro Micrólogos
Etiquetas:
Desigualdad,
Muerte,
Pobreza,
Relatos,
Venganza
sábado, 30 de enero de 2010
viernes, 29 de enero de 2010
jueves, 28 de enero de 2010
miércoles, 27 de enero de 2010
martes, 26 de enero de 2010
lunes, 25 de enero de 2010
domingo, 24 de enero de 2010
MICRORRELATO
VIOLENCIA DE GÉNERO
_______________________________
Aquella noche, el mar embistió con crueldad lanzando contra la roca oleajes, arenas, maderos. Duramente golpeada por el temporal, dejó caer algún fragmento, pero con paciencia lo soportó todo. Como siempre, continuó creyendo que era bueno, manso y fiel, pero que algunas noches se volvía loco, y se rebelaba contra ella, agrediéndola hasta en lo más íntimo. Nunca ha podido averiguar por qué cada cierto tiempo se comporta así, pero eso no le impide seguir pensando en su naturaleza serena y fiable, o que poco después —al alba— él volvería tranquilo a lamer su base, dulce y sensible, a regalarle esas caricias espumosas que tanto le gustan, que tanto les unen. Como siempre, aquella noche la roca lo soportó todo, otra vez más, porque creía amarlo, en el fondo, muy profundamente.
Del libro Micrólogos
Etiquetas:
Desigualdad,
Mar,
Pelea,
Relatos,
Sacrificio
sábado, 23 de enero de 2010
viernes, 22 de enero de 2010
jueves, 21 de enero de 2010
miércoles, 20 de enero de 2010
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)
AVISO A VISITANTES
Todas las imágenes (salvo excepciones indicadas) y los textos que las acompañan son propiedad del autor de esta bitácora. Su uso está permitido, siempre que se cite la fuente y la finalidad no sea comercial
Si alguien se reconociera en alguna fotografía y no deseara verse en una imagen que puede ver cualquiera, puede contactar conmigo (fredarron@gmail.com), y será retirada sin problema ninguno.
Si alguien se reconociera en alguna fotografía y no deseara verse en una imagen que puede ver cualquiera, puede contactar conmigo (fredarron@gmail.com), y será retirada sin problema ninguno.









.jpg)



.jpg)

-.jpg)

-.jpg)

-.jpg)

.jpg)

-.jpg)

-.jpg)

-.jpg)

-.jpg)

-.jpg)

-.jpg)




