lunes, 15 de junio de 2009
miércoles, 3 de junio de 2009
lunes, 18 de mayo de 2009
miércoles, 6 de mayo de 2009
lunes, 6 de abril de 2009
miércoles, 25 de marzo de 2009
martes, 10 de marzo de 2009
miércoles, 25 de febrero de 2009
sábado, 14 de junio de 2008
Molestia por las gaviotas
Pero, en ocasiones, el instante se alía con la fortuna, y lo que antes rezumaba odio o enfado se trueca en admiración contemplativa. Es entonces cuando uno se reconcilia con el mundo, al comprobar que el reino animal, la naturaleza, y la creación humana pueden coexistir sin que la unión resulte desequilibrada o forzosa. Y durante unos minutos, uno recobra cierta dicha interior, tan escasa y puntual, tan necesaria.
jueves, 29 de mayo de 2008
Ambición desmedida
miércoles, 28 de mayo de 2008
Vuelo ambivalente
domingo, 2 de marzo de 2008
Gallo huido
La verdad es que nos daba mucha pena el gallo, y más cuando vimos detrás de nosotros a dos docenas de gallinas, aguardando a que nos fuéramos, para dar rienda suelta a sus deseos. Solidarios, las espantamos a correazos y a voces: el corral se vació en un instante. El gallo comprendió que estábamos de su parte, pero seguía temblando tras la puerta.
Pero lo cierto es que el gallo nos daba tanta pena, que esa misma noche decidimos poner fin a sus miedos, y alegramos la cena con la inusual tersura de su carne, de sabor exquisito, que más de uno atribuyó a las transformaciones que sufre la carne ante el sexo ejercitado de forma regular, cuando va unido a un pánico muy prolongado.
sábado, 23 de febrero de 2008
La sombra de los buitres
Cuando lo vieron llegar, los demás buitres notaron que aquello les era desconocido. Sus formas les eran familiares, pero sólo su contorno era visible a sus ojos y se podía ver a su través. Sus evoluciones mostraban una suavidad extrema y precisa, y su vuelo todavía se oía menos que los suyos. También notaron con asombro que no les tenía en cuenta a la hora de decidir la dirección de sus alas; su cabeza tampoco parecía mirarles. Volaba sin ninguna atadura y sin un plan que pudiera adivinarse. Para colmo, eran ellos quienes habían de apartarse con rapidez cuando sus trayectorias parecían que iban a encontrarse. El jefe del clan, enfurecido por la situación, reivindicó su jerarquía y tomó la iniciativa de deshacer el embrujo que los demás parecían haber estar sufriendo. Sin previo aviso, se fue de frente contra el intruso, cuya transparencia a todos admiraba. Su rabia se trocó en espanto, cuando comprobó que su ataque no tuvo consecuencia alguna, ya que su cuerpo atravesó aquella forma limpiamente, sin que aquella forma modificara su trayectoria o su actitud. Lo intentó más veces, pero con idéntico resultado. Al final, se dio por vencido. Pero todos pudieron captar que la extraña forma seguía sin mirarlos y que, poco a poco, se alejaba. Nunca más lo volvieron a ver. Pero en el grupo ya nada volvió a ser lo mismo.
lunes, 18 de febrero de 2008
Amor, sólo en apariencia
sábado, 9 de febrero de 2008
Listos pájaros bobos
--¿Habéis visto? Nos llaman pájaros bobos -dijo el primero.
--¿Qué dices? Eso son majaderías -terció el segundo.
--Chorradas. Todo el mundo sabe que somos pingüinos -acotó el tercero.
Tras esa plática, los cuatro se sintieron muy fatigados y decidieron echarse a dormir un buen rato, sin hacer caso a nada más, y tanto y tan bien lo hicieron, que incluso casi se les pasa la hora del avituallamiento de la tarde, cuando más gente había.
--Ya están ahí todos. Ahora veréis -advirtió el cuarto.
--¿Qué veremos? -inquirió el primero.
--Que de bobos no tenemos nada, nada, más bien al contrario -reafirmó el tercero.
--Desde luego. Adoptemos, pues, una actitud individualista, seria, bien diferenciada -resolvió el segundo.
Así lo hicieron, y un instante después fue cuando el crío pelirrojo tiró la foto.
lunes, 21 de enero de 2008
Maniobra de aterrizaje
miércoles, 16 de enero de 2008
Volar en silencio
martes, 1 de enero de 2008
Aquí hay algo que falla
Aleta caudal
Esta vez, sin embargo, me brindaron un motivo de felicidad componiendo para mí durante un breve instante una figura que, ligeramente perfilada con el Photoshop, es la que ahora muestro.
Me pareció muy ocurrente que a un grupo de pájaros tan poco creativo le diera por jugar a ser la parte trasera de una ballena, un animal pausado, inmenso, solitario, inteligente. Otra paradoja más de las que se compone la vida.
AVISO A VISITANTES
Si alguien se reconociera en alguna fotografía y no deseara verse en una imagen que puede ver cualquiera, puede contactar conmigo (fredarron@gmail.com), y será retirada sin problema ninguno.