sábado, 8 de agosto de 2009
miércoles, 5 de agosto de 2009
lunes, 3 de agosto de 2009
jueves, 30 de julio de 2009
miércoles, 29 de julio de 2009
lunes, 29 de junio de 2009
sábado, 13 de junio de 2009
viernes, 29 de mayo de 2009
martes, 12 de mayo de 2009
martes, 7 de abril de 2009
sábado, 4 de abril de 2009
miércoles, 25 de marzo de 2009
lunes, 16 de marzo de 2009
jueves, 5 de febrero de 2009
lunes, 26 de enero de 2009
sábado, 21 de junio de 2008
Arquitectura olímpica
jueves, 5 de junio de 2008
La cascada y las columnas
Cuando sobrevino el terremoto, dos tercios de las columnas yacían en el suelo, fragmentadas por la violencia del temblor. La cascada también fue removida de su sitio, y desde entonces vierte sus aguas unos metros más al oeste. No notamos, en cambio, que su expresión hubiera variado apenas. Curiosamente, esa sinfonía de salpicaduras tenía ahora otro tono, y todos sabemos qué nos está diciendo la cascada con su inagotable discurso.
miércoles, 4 de junio de 2008
Realidades fragmentadas
sábado, 17 de mayo de 2008
Prestos a la defensa, de nuevo
sábado, 10 de mayo de 2008
Escaleras al recuerdo
Subí muchas veces esa escalera de pequeño, cuando me mandabas ir al desván a que descubriera por mí mismo que había mundos extraños que se podían juntar en un lugar lleno de polvo. Cuando te fuiste para siempre, mi memoria te recordaba en cada aspecto positivo que la vida me fue dando. También bajé en muchas ocasiones esos peldaños, cuando iba a la escuela, cargado con la mochila que me habías comprado al principio del curso, cuando ya no tenía esperanza de que lo hicieras; o cuando trasladamos la antigua biblioteca al salón que habilitamos tras tirar el maldito tabique. Subimos y bajamos ambos muchas veces esas escaleras. Ahora sólo se puede contemplar con la mirada la devastación que el tiempo ha llevado en lo que fue nuestra casa. Dos líneas quebradas oblicuas sobre la horizontal del suelo, unos colores sucios y terrosos que tienen más que ver con el tiempo y la memoria que con cualquier realidad presente. Unas manchas en zigzag que servirán para pintar tu rostro con la mente, ayudado por mi recuerdo. Porque, si me esfuerzo, sabría reconocer en todas esas grietas cada una de tus hermosas arrugas, y tus blancos dientes en la sombra de esos peldaños desnudos.
AVISO A VISITANTES
Si alguien se reconociera en alguna fotografía y no deseara verse en una imagen que puede ver cualquiera, puede contactar conmigo (fredarron@gmail.com), y será retirada sin problema ninguno.